La biodiversidad del suelo juega un papel determinante en el mantenimiento de la vida del planeta y se ve amenazada por la agricultura intensiva, la deforestación, la urbanización, la pérdida de materia orgánica, la compactación y sellado del suelo, la acidificación del suelo y los desequilibrios de nutrientes, la contaminación, la salinización y la sodificación, los incendios, la erosión y los corrimientos de tierras, el cambio climático y las especies invasoras según la FAO.
Foto: https://op.europa.eu/webpub/eca/special-reports/desertification-33-2018/es/